Uno de los trabajos más importantes que debemos hacer es con nuestro cuerpo mental, con nuestra mente, pues en ella guardamos muchas creencias y patrones aprendidos que nos limitan en nuestra cotidianidad y nos dificultan el avance.
Ahora, en estos momentos, en que expandimos nuestra percepción hacia la parte más sutil o energética de cada uno de nosotros, nuestra mente más racional debe hallarse en calma y confiada para permitirnos experimentar en estas redes energéticas que también nos conforman, y que constituyen todo lo que tenemos a nuestro alrededor.
Sin que nuestra mente racional confié y se calme difícilmente podemos abrirnos a esta percepción que algunos llaman extrasensorial. Para muchos de nosotros los cambios son difíciles de aceptar y, a veces, nos mantenemos en la monotonía, aunque sabemos que eso no nos beneficia, para no tener que llevar a términos cambios, cambios no solo en nuestros hábitos de vida, sino también cambios en nuestra mente, en nuestras formas de pensamiento.
Hoy se nos pide que todas estas formas de pensamientos que nos limitan se transformen y solo pueden transformarse si nos abrimos con confianza y con tranquilidad a esta percepción más sutil. Todos hemos vivido experiencias que nos han hecho evidente que también estamos formados de una parte energética, a veces por intuiciones que nos han llegado, a veces también por percibir sensaciones cuando aún no están presentes los objetos o los espacios en donde estas percepciones tienen lugar, o incluso si cerramos los ojos e intentemos sentir nuestro cuerpo físico podemos, a veces, sentirlo muy desequilibrado o incluso rotado y si abrimos los ojos lo vemos firme y estructurado. Es porque hemos conectado con nuestra parte sutil y nuestra parte sutil o energética también necesita cuidado, necesita limpieza, necesita orden.
¿Y cuántas veces no nos hemos negado sensaciones que hemos percibido porque luego las filtramos a través de nuestra mente racional? y sino, aunque haya habido evidencias claras de hechos extraordinarios en nuestra vida, ¿los hemos negado?
El miedo siempre tiene lugar en nuestra cotidianidad, a veces disfrazado de las formas más singulares e increíbles. Abrámonos sin miedo a percibir nuestra parte sutil, dejaremos de sentirnos pequeños, débiles, porque nos sentiremos mucho más expandidos, grandes, fuertes e incluso si practicamos podemos sentirnos ilimitados, esa es la experiencia a la que nos lleva la percepción de nuestra energía.
Cuando, a veces, decimos que estamos traspasando portales por situaciones astrológicas concretas, significa que estamos avanzando y conectando a nuevas energías, también para cada uno de nosotros traspasamos portales en nuestra cotidianidad para conocer más nuestra energía, una energía que conlleva información, información útil y necesaria para ese tiempo, para cada uno de nosotros para que pueda continuar el camino con mayor confianza y seguridad, y así, pueda disolver los miedos que están anclados aún en nosotros.
Precisamente el estado de meditación que es medio estar, nos permite estar aquí y allí, más allá en el Universo, así podemos tener la sensación de estar presente en todas partes o desaparecer al mismo tiempo, no tengamos miedo de viajar por el Universo, somos Seres del Universo, también el Universo es nuestro hogar.
Conectar con nuestra parte física nos enraíza en la Tierra y con todo lo que aquí acontece, pero conectar con nuestra parte energética nos conecta con el Universo y con todo lo que en él acontece. No nos contentemos solo con lo de aquí, abrámonos a lo de allí, con curiosidad, para tener un mayor conocimiento de como funcionamos nosotros, de cómo funciona la vida y el Universo.
Cada uno de nosotros tiene infinitas conexiones, conexiones que se activan y se desactivan según el momento, según la experiencia, según la actitud que tenemos frente a esa experiencia. Todas esas conexiones son de doble sentido, a través de ellas nosotros influimos en el Universo y en las mismas conexiones nos llega información del Universo que influye en nosotros. Poder discriminar, si la información nace en nosotros o nace fuera de nosotros, nos puede permitir un mayor bienestar, un caminar más seguro y tranquilo por esa existencia, porque habrá cosas de las que seamos responsables, pero otras serán cosas que nos faciliten este caminar.
Respiremos para sentir nuestro cuerpo. Respiremos para percibir nuestra energía, así desde esa percepción más clara todos somos mucho más grandes, incluso podríamos decir que nuestro cuerpo energético se pierde en los confines del Universo. Respiremos para percibir esta gran expansión, este cuerpo energético ilimitado, recojamos información a través de la respiración. Cuando inspiramos recibiendo energía de todo ese cuerpo energético, cuando exhalamos trasmitiendo energía hacia el Universo.
Abrámonos a esta mayor percepción a través del corazón, un corazón abierto y conectado a esta energía amorosa que todo lo sostiene y que facilita esta percepción de estas redes energéticas, pero nuestra mente debe facilitar también esta comprensión de nosotros. Que nuestra mente se abra a estas nuevas percepciones. Que nuestra mente nos acompañe en este crecimiento. Que nuestra mente haga espacio a nueva información y nuevo conocimiento.
Respiremos para aprovechar la energía de ese día, esta energía del Solsticio de invierno que esta tan presente en el ambiente. Esta energía que se acerca a nosotros para que podamos tocarla, olerla, gustarla, verla, oírla. Incorporemos nuestra parte energética en nuestra cotidianidad, aprovechemos sus cualidades, accedamos a su información, dejémonos iluminar por su Luz.
Todos tenemos una Luz que se muestra en nuestro séptimo chackra, con un color singular para cada uno. Esa Luz forma parte de nuestra energía. Intentemos percibir su color.
Respiremos esta energía, ese color, esa vibración, porque esta energía, este color, esta vibración conlleva información para nosotros, para sanar nuestra mente. Para que nuestra mente no nos limite. Para que nuestra mente nos acompañe. Para que nuestra mente se abra, haga espacio, se ordene, se limpie, se expanda y, por ello, no sintamos miedo, confiemos y mantengámonos en calma.
Todo es para bien.
con Amor y Luz-20-12-2024
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