Archivo del autor Qualitat de vida

Meditación Solsticio Invierno 21

Bienvenidos a este momento. Estamos contentos y somos felices de que os reunáis para  compartir y festejar este momento. Esta fiesta de la Luz inicio de un nuevo ciclo. Es importante para el compartir que os sintáis todos iguales, hermanos de la Tierra y del Universo constituidos por la misma energía. Así cada uno de vosotros, llenos de estas distintas energías, se hace uno con todos. Esta semejanza propicia la sincronización  de vuestra respiración, en un mismo latir, que se siente más allá de este espacio de la Tierra y en el Universo. Un latir que se une a otros muchos latidos, que hoy se han unido en el planeta Tierra, para celebrar esta festividad.

Visualizamos la Tierra llena de pequeñas luces que se avivan con este compartir. Luces que alimentan la Luz de la humanidad, como un solo cuerpo. Luz necesaria para ver claro, para comprender, para confiar, para crecer. Más estas luces que vemos hoy en la Tierra, nacen todas de vuestro interior. Esa es la Luz más pura, la Luz más potente, la  que en verdad ilumina. Respirad en este espacio, ahora lleno de esta Luz, Luz de vida, Luz de Amor, Luz de paz, Luz de sanación, Luz de armonía.

Os acompañamos muchos otros Seres, para algunos, invisibles a sus ojos, pero si pueden reconocerse desde el sentir. Nunca estamos solos, siempre estamos acompañados por Seres que cuidan de nosotros. Aún en este tiempo de grandes cambios, de inicio de una nueva era, estamos más atentos a todos y a cada uno de vosotros. Si encontráis espacio/tiempo para sentir, experimentareis este cuidado próximo, un cuidado próximo que va mucho más allá de lo puro material.

En estos momentos que es más fácil activar el sentir, estad atentos a todo lo que os acontece a cada uno en este instante. Cualquier sensación en el cuerpo físico. Cualquier pensamiento que nazca de este instante. Cualquier emoción que surja en el corazón, es toda una realidad para cada uno. Podéis sentir alegría y tristeza, Amor y desamor, nerviosismo y tranquilidad, todo está para todos, todo es para compartir y desde este compartir alimentar a la humanidad.

Si estamos aquí es porque hemos sentido el llamado de la Luz, un encuentro para avivar esta Luz interior, tan necesaria para clarificar nuestro camino,  para afirmarnos en nuestro sentir, para festejar que hoy es un inicio. Un inicio que, si nace en el punto cero donde no hay nada escrito, esta abierto a todas las posibilidades. Busquemos este punto cero en cada uno de nosotros. Facilitemos este inicio dejando ir todo aquello que nos condiciona, todo pensamiento que no nos alimente y movámonos con esta nueva energía que hoy, llega a nosotros.

Que esta Luz avivada, ahora, nos haga volver mucho más sinceros con nosotros mismos, mucho más coherentes en nuestro interior y hacia el exterior. Que esta Luz aclare nuestra visión, nos permita ser más pulcros y cuidadosos, nos acompañe en nuestro andar más firme y nos permita recuperar la alegría de vivir. Permitamos a esta Luz, ahora presente, que ilumine a la humanidad infundiendo más Amor, más alegría, más confianza, más seguridad, más paz…

Que esta Luz nos hermane más y más.

Iluminemos con la intención toda la Tierra, como muestra de agradecimiento por todo lo que hace por cada uno de nosotros, por todos los Seres que la habitan. Agradezcamos su cuidado, su protección y su Amor incondicional para cada uno, para cada cosa creada.

Y expandamos toda esta Luz, aquí presente, hacia todo el Universo como muestra de agradecimiento, como muestra de hermandad, como muestra de paz y alegría.

Sintámonos Seres del Universo. Sintámonos Seres de la Tierra. Sintamos al SER en cada uno de nosotros, en este cuerpo físico. Ese SER que es Luz purísima.

Que desde hoy, a partir de hoy, podamos ser una manifestación de esta Luz, de ese SER, en nuestra cotidianidad, en nuestras relaciones, en nuestro corazón, también en nuestra mente, y seamos portadores de esta nueva Luz.

La Luz es.

La Luz está siempre presente.

¿Has oido hablar de la «penicilina rusa»?

La «penicilina rusa» (especialmente buena para los resfriados y cuadros gripales).

Ingredientes: dos pomelos, seis limones, dos cebollas y siete dientes de ajo.

Elaboración: lavar los limones y pomelos y, sin pelar, se ponen a hervir en una olla con dos litros de agua junto con las cebollas y los ajos, cuando arranca el hervor se pone el fuego al mínimo y se deja hervir 10 minutos. Cuando lleva 3 minutos hirviendo, se añade ½ cucharilla de pimienta de cayena.

Se cuela y se beve un vaso 3 o 4 veces al día.

Una vez hecho, se puede guardar en el frigorífico 15 días o 3 semanas.

Reprogramación ADN Hélice 13

Esto es lo que soy, percibo perfectamente la conexión entre mi materia y mi energía, y desde esa conexión profunda, nacida de la conexión con la Fuente, me declaro un nuevo Ser.

Así con los ojos cerrados, envueltos en este silencio, experimentamos el Vacío, esta inmensidad en nosotros mismos, como si estuviésemos en nuestro útero cósmico. Estamos en un entorno maternal, paternal, familiar, que en algún momento en nuestra experiencia recordamos, pero ese recuerdo es fugaz y perecedero. Podemos sentirnos en esta inmensidad, sostenidos por la energía del Vacío. Un Vacío misterioso en el que estamos solos pero plenamente acompañados. Permitámonos flotar en este Vacío sin necesidad alguna de movimiento, simplemente de dejarnos.

Con la reprogramación de las 13 hélices, hemos estado gestando un nuevo Ser, un Ser que hoy se reconecta con nosotros, formando una unidad, como el yin y el yang, danzando en una melodía armónica y equilibrada, porque somos Seres tanto de la Tierra como del Cielo.

Con esta reprogramación de todas nuestras hélices, hemos activado esta conexión para poder experimentarla en nosotros, en nuestra cotidianidad. Si nos permitimos sentir, vamos a accionar nuevas formas de relacionarnos, nuevas formas de sanarnos, nuevas formas de organización. Llegara nueva información y nuevo conocimiento para todos y para cada uno, en beneficio de toda la humanidad.

Hoy es, pues, un día señalado por ese nuevo nacimiento. Un nacimiento que nos abre al Universo, al Vacío, que aunque no lo podamos ver con nuestros ojos, esta lleno de estas gestaciones con otros muchos Seres de la humanidad y del Universo formando una red luminosa que se acerca a cada nuevo mundo. Y, ahora, en la Tierra nace un nuevo mundo, con nuevos Seres. Seres completos. Seres unidos en su materia y en su energía. Con capacidades nuevas, con potencialidades olvidadas.

Simplemente dejémonos envolver por esta energía de esta treceava hélice.
Permitámonos sentirnos, ahora, en nuestra dualidad, unidad. Ya no habrá necesidad de entrar en el sueño para despertar, sino que estaremos plenamente despiertos.

Sintamos como todo nuestro cuerpo energético esta mucho más presente y nuestro cuerpo físico más disuelto, más expandido. Difícilmente podemos percibir los límites entre uno y otro. Eso es lo que somos. Eso es lo que soy, percibo perfectamente la conexión entre mi materia y mi energía, y desde esta conexión profunda, nacida de la conexión con la Fuente, me declaro un nuevo Ser.

Un Ser capaz de mantener el Amor frente a cualquier experiencia, llevar la aceptación y la tolerancia a su máximo nivel, ser paciente y pacifico con todos y con todo, comprender que todos somos parte de un mismo cuerpo.

Mi yo completo se siente en armonía, aquí en la Tierra, en armonía, aquí en el Cielo. En equilibrio, aquí en la Tierra, en equilibrio, en el Cielo. Me entrego a practicar esta unidad, en cualquier momento, en cualquier lugar.

Me declaro hija/hijo de la Fuente con todo su potencial, con todo su Amor, con todo su conocimiento. Voy recordando, religando, reconectando con quien soy. Me nutro en este espacio del Vacío, en el que me siento en paz para recoger la energía necesaria para que así sea. Porqué, así, es.

Escojo liberarme de todo aquello que me priva de Ser. Ahora que se quien soy, me inicio en este nuevo andar. Andar en la Tierra y andar en el Cielo, escogiendo en cada momento libremente, donde andar.

Respiro y los filamentos que me cubren se van retirando poco a poco para permitirme ver. Veo mis nuevos pies, mis nuevas piernas, mi nueva pelvis. Siento mi nueva columna. Veo mi abdomen y mi tórax, mis espaldas, brazos y manos. Veo mi cuello, mi cara y mi cabeza.

Soy un nuevo Ser, un Ser que conecta la energía de la Tierra y del Cielo en sí mismo, en un mayor equilibrio y una más fina armonía.

Me veo y me sonrío, me miro amorosamente y me abrazo.

Por fin llego este momento, tanto tiempo esperado y deseado, de ser uno conmigo mismo.

Mantengo el abrazo, la mirada y la sonrisa y me voy sintiendo.

Y a más sentir, más Luz me envuelve.

Me mantengo, así, el tiempo necesario para integrar completamente.

Con Amor y Luz-19-11-2021

¿Conoces qué es el Ghee y sus virtudes?

Se conoce, también, como la mantequilla clarificada.
No tiene lactosa.
No se debe guardar en la nevera…
Es un nutriente excepcional para acompañar a todo tipo de alimentos.
Ayuda a la digestión.
Es bueno para el sistema cardiovascular.
Depurativo del hígado.
Antioxidante natural…
y también para usos externos.

Reprogramación ADN hélice 12

Hoy más que nunca, necesitamos activar esta conexión desde la Fuente a la Madre Tierra para sostener esta nueva energía,  así se activan multitud de filamentos creando una red luminosa,  poderosa y con una energía de alegría y celebración que es compartida por todos.

Es importante hoy, en esta reprogramación de la doceava hélice, mantener esta energía de alegría y celebración que hemos llevado hasta este chacra, hasta este filamento, hasta esta hélice, y gracias a esta energía vamos a visualizarlo frente a nosotros, moviéndose en armonía y equilibrio.

Es un filamento luminoso, puro, fuerte, sólido. En la medida en que se  presente frente a nosotros, aportémosle todas estas cualidades,  porque el vínculo que tenemos con la Fuente es luminoso, es fuerte.

Si nos es difícil percibir el filamento es que, a lo mejor, en algunas otras existencias hemos perdido esta conexión tan próxima.

Si lo vemos delgado, frágil, es que esta conexión con la Fuente no la hemos tenido muy presente en esta existencia de ahora, sintiéndonos a menudo solos frente a las experiencias.

Si tiene poca Luz, debemos llevarle más a menudo, esta energía de alegría, de celebración, que es la que se experimenta cuando este vínculo con la Fuente está activo.

Este filamento empieza a deslizarse hacia abajo, conectando con cada uno de los chacras que hemos activado. Conecta perfectamente con todos, en un eje, desde el onceavo chacra hasta el primero, conectando este chacra con la Madre Tierra.

Así, en esta posición, si nos observáramos desde lejos, veríamos un filamento luminoso que une la Fuente con la Madre Tierra y, nosotros, simplemente somos intercambiadores de esta energía.

Hoy más que nunca, necesitamos activar esta conexión desde la Fuente a la Madre Tierra para sostener esta nueva energía,  así se activan multitud de filamentos creando una red luminosa,  poderosa y con una energía de alegría y celebración que es compartida por todos. Permitimos que esta conexión perdure unos minutos, sintiéndonos totalmente iluminados, plenamente guiados, profundamente protegidos, infinitamente amados.

Potenciamos esta red de conexión de la Madre Tierra con la Fuente, siendo instrumentos de Luz, cada uno de nosotros, para iluminar este tiempo, un tiempo de cambio, de transformación. Sintamos este entre-enlace tan especial de la Fuente con la Madre Tierra, a través de cada uno de nuestros chacras.

Nuestra materia se expande,  la gravedad pierde fuerza, nos sentimos al mismo tiempo, plenos y ligeros. Con un cuerpo mucho más grande, una mente más lúcida, un corazón acogiendo esta energía de alegría y de celebración para llenarse plenamente.

Inspirando esta energía,  mi cuerpo se diluye en este espacio. Llego a percibir todas mis partículas vibrando en esta alegría,  en esta energía de celebración. Se mueven todas las partículas, en este espacio,  festejando, danzando.

Exhalando, vuelven a unirse poco a poco para conformarme de nuevo. A cada exhalación siento más mi cuerpo físico, mis manos,  mis pies. Siento toda mi columna, una columna más relajada y expandida, más liberada, siento mi pelvis llena de energía vital, libre de todo dolor. Mis hombros se abren para dejar paso a mis alas. Siento mis alas y mi cuerpo físico y, respirando, incorporo mi mente, una mente distinta, una mente más elevada,  más consciente,  más conectada.

La conexión con la Fuente me ha transformado, me ha permitido ver mi completud. Un Ser plenamente completo, perfecto, poderoso, eterno, estructurado ahora, en este nuevo cuerpo, un cuerpo armado desde esta alegría y energía de celebración.

Permito a este filamento desconectar de la Madre Tierra e iniciar su ascensión de nuevo por cada uno de los cuerpos energéticos, y agradezco a cada uno de ellos por permitirme ser quien soy,  por permitirme estar aquí y ahora, hasta que llega al doceavo chacra y penetra en él, dejando simplemente un punto luminoso estrellado que es la conexión con la Fuente.

Desciendo desde este chacra al onceavo chacra, este punto cero facilitador de la conexión con la Fuente. Al décimo, noveno y octavo chacra y, en este chacra octavo,  mis alas se disuelven en este espacio iluminando cada una de estas partículas, en todo este entorno. Llego al séptimo chacra, el primer chacra de mi cuerpo físico, íntimamente conectado con el sexto chacra, que me permite la conexión con toda la energía sutil,  el mundo invisible,  la realidad vibracional y, llego a mi quinto chacra, el chacra de la expresión, de la co-creación, y me mantengo en este chacra, unos minutos para expresar todo aquello que nace de mi sentir de esta experiencia.

Bajo al cuarto chacra, al tercer chacra, al segundo y al primer chacra, siento mis pies y en este sentir permanezco en silencio.

Con Amor y Luz-15-10-2021